Yo soy pajarillo errante
que ando vagando
lejos del nido;
vago por mi enramada
sin paz ni abrigo,
sin paz ni abrigo.
Alzo mi canto
y el que escucha no sabe,
el que escucha no sabe,
¡Ay!. . . que sufro tanto. . .
Paso la vida errante
con mi tristeza
de valle en valle,
ocultando una pena
que nadie sabe,
que nadie sabe.
Fue mi destino,
vivir triste y sin calma,
dejar trozos del alma
¡Ay!. . . por mi camino
Cuando el cazador me busca
por mi guarida,
por mi guarida,
defenderme no puedo,
suya es mi vida,
suya es mida.
Fue mi destino
fue seguro mi suerte,
sólo encontrar la muerte
¡Ay!. . . por mi camino.
En la mañana cuando
en el oriente
el alba brota,
yo canto mi tristeza
diluída en llanto
gota tras gota.
Y cuando trino,
en las notas del canto,
riego gotas de llanto
¡Ay!. . . por mi camino.
Yo soy como el arroyuelo
que siempre brota,
que siempre brota,
que deja en la rivera
de su corriente
gota tras gota.
Es mi destino,
vivir triste y sin calma
dejar gotas del alma
¡Ay!. . . por mi camino.
Conozco ésta canción. Algo diferente, pero muy semejante. Conozco su música, ( preciosa ) viene de mis tatarabuelos, y es tradición de la familia.
ResponderEliminarSé, muchísimas más !. Muy viejas, con acento español e indígena ( con ritmo de danza ). Saludos afectuosos, conocidos desconocidos..
Esta canción es la historia de una mujer que un hombre abandonó, y en su casa ya no la recibieron. Ella vivió una vida de prostitución para subsistir. Y dice cuando el cazador me busca ( es un cliente ) defenderme no puedo, tuya es mi vida. Y ella ponía un precio. Así fue en aquellos tiempos, y aún en algunos lugares siguen así. Saludos
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